lunes, 19 de enero de 2015

Las migraciones durante la Edad Moderna

                Tradicionalmente se considera que la población de la Edad Moderna, era fundamentalmente estática, sin apenas movimientos migracionales, sin embargo, durante la Edad Moderna, se produjeron multitud de movimientos poblacionales de múltiples características, algunos que afectan a individuos únicos y otros, que por el contrario, lo hacen sobre grandes poblaciones.
            Por una parte, nos encontramos con migraciones temporales, llevabas a cabo, por una parte de la población sobre todo del tercer estado, se movilizaba por causas laborales, como pueden ser los ganaderos con una ganadería trashumante o incluso, jornaleros que se mueven por toda Europa, en búsqueda de jornal, ya que no era suficiente el que recibía en sus tierras o simplemente, porque en el ámbito agrario de sus lugares de origen no tenían cabida. Este último grupo, como algunos pescadores especializados en sectores como la pesca del bacalao o del atún, podían fácilmente revertir esa condición de migración estacional y convertirla en definitiva.
            Otra de estas pequeñas migraciones de carácter personal, es la de los vagabundos y gente empobrecida, excluidos sociales que vagaban de ciudad en ciudad buscando caridad, y que, en épocas de crisis, su acumulación en las ciudades, llegó a preocupar a las autoridades y a eruditos, como Juan Luis Vives, que, incluso llega a publicar en  1525, De subentione pauperum, donde propugnaba un cambio en la idea de pobreza.
            Otro tipo de migración, sería la del campo a la ciudad, el llamado éxodo rural, que tuvo como consecuencia el crecimiento demográfico de las ciudades y, con ello, el auge del mundo urbano. Esto, no estaría exento de consecuencias, entre las que encontraríamos la difusión de conocimientos, o la modificación de las estructuras sociales.
            Por último podemos tratar las migraciones masivas de poblaciones a otros países, o incluso, continentes, estas pueden ser de dos tipos, o bien forzosas, o voluntarias. Dentro de las primeras, podemos destacar las de corriente ideológica, insertas en una época donde la religión era importante, como las expulsiones de los judíos, que fueron sin duda los más perjudicados durante esta época, los moriscos, o en menor medida, también los gitanos.
            Otro tipo de migraciones de carácter forzoso, son los destierros o exilios, habituales en la Edad Moderna, en los cuales se enviaba a la población condenada, a territorios alejados del centro del imperio; ejemplos de ello podríamos destacar la Corona Hispánica en América o Portugal por Brasil y por sus colonias en el Índico. Llama la atención que muchos de estos destinos, son tomados por la población como el inicio de una nueva vida, en la que en muchas ocasiones, no cambian sus actividades ilegales por las que han sido castigados, como el caso de la brujería o la hechicería.
            El auge de los imperios coloniales y la explotación de tierras, hizo que el comercio de esclavos se convirtiese en un negocio lucrativo, que tuvo su culminación en el siglo XVIII. Estas poblaciones de esclavos, movilizaron a gran cantidad de poblaciones desde África subsahariana hacia América, Europa y Asia.
            Por último, hacer referencia a las migraciones de carácter voluntario hacia América, cuyo descubrimiento supuso un gran movimiento de población hacia el nuevo continente. Portugal y la Corona de Castilla fueron las más afectadas, pues el monopolio que tuvieron en la explotación de las nuevas tierras y en las rutas del Atlántico, se mantuvo durante prácticamente toda la Edad Moderna. Estas migraciones afectaban a todos los estratos de la población de la época, desde mercaderes, soldados para defender las posesiones, clérigos para evangelizar a las poblaciones, o nobles, sobre todo segundones que emigran a América para ennoblecerse.

            Bibliografía:
-Floristán, A. (coord.), Historia moderna universal, Barcelona, Ariel, 2011.

-Ribot García, L. A. (coord.), Historia del mundo moderno, Madrid, Actas, 2010.

1 comentario: